Un viaje de ida con Alejandro Junger
Cuerpo & Alma
Con su bestseller Clean, el cardiólogo uruguayo ha llevado a millones de personas del mundo entero a cambiar su estilo de vida para siempre.
“El sistema Clean es como ducharse: cada cuánto uno necesita ducharse y por cuánto tiempo, va a depender de lo que uno hace entre ducha y ducha”.
A. Junger
Hace tiempo que estoy por leer el libro Clean, no sé si para hacerlo o porque me intriga la temática. Soy una convencida que los libros saben esperar, y Clean me está esperando en mi biblioteca desde hace dos años. Ya llegará mi momento.
Me contacté con Alejandro Junger y, apelando al sentido común, le hice algunas preguntas que siempre me vienen a la cabeza cuando alguien me cuenta que está haciendo el cada vez más famoso Clean.
La Citadina: ¿Qué fue lo qué te motivó a desarrollar el programa Clean?
Alejandro Junger: Al mudarme de Uruguay a NY mi estilo de vida cambió drásticamente. A los pocos años me encontré muy enfermo, con alergias, colon irritable y depresión. Después de tres consultas mis colegas doctores me dieron siete medicamentos. Mi intuición me decía que no era una solución adecuada para mis problemas, así que al terminar mi especialización en cardiología, me dediqué a encontrar otra solución. Fue así que me tropecé después de una larga búsqueda con los conceptos y la práctica de detoxificación, y fue así que encontré la solución para todos mis problemas de salud sin necesitar ni un solo medicamento. Todos mis amigos me preguntaban que había hecho, y empecé a diseñar programas para ellos y después para mis pacientes. Ese fue el proceso que me llevó al método Clean.
LC: ¿Cuál es el concepto Clean?
AJ: Vivimos inundados por moléculas toxicas, en el aire que respiramos, en el agua que tomamos y con la que nos bañamos, en los cosméticos que nos ponemos sobre el cuerpo, en los productos de limpieza del hogar, pero sobre todo en los alimentos que consumimos. Estas moléculas toxicas terminan circulando en nuestra sangre, afectando células, órganos y causando síntomas y enfermedades. Nuestros cuerpos vienen equipados con sistemas de detoxificación súper efectivos, pero como vivimos de una manera tan antinatural estos sistemas están trabajando de una forma sub-óptima en la mayoría de la gente. El sistema Clean crea las condiciones en el cuerpo para que estos sistemas de detoxificación trabajen a máxima efectividad, y los resultados son increíbles.
LC: Hagamos de cuenta que tenés que explicar en pocas palabras en qué consiste el sistema Clean…
AJ: Básicamente hay que comer de cierta manera para estimular los sistemas de detoxificación y darle al cuerpo los nutrientes necesarios para que estos puedan hacer su trabajo por completo.
LC: 21 días, 3 semanas… ¿Por qué?
AJ: 21 días es lo que le lleva a la mayoría de la gente para reactivar la detoxificación y reparar ciertas disfunciones que se desarrollan por nuestro estilo de vida enfermo. A algunos les llevaría menos, a algunos más, pero 21 días es el promedio para la mayoría de la gente que va a probar el sistema.
LC: ¿Cada cuánto recomendás hacerlo?
AJ: En general, una vez al año; pero depende de cada persona: de cómo vive y come, entre que hace un programa y el siguiente. El sistema Clean es como ducharse: cada cuánto uno necesita ducharse y por cuánto tiempo, va a depender de lo que uno hace entre ducha y ducha; si después de una ducha te revolcás en el lodo, vas a necesitar una ducha enseguida.
LC: ¿Creés que es para todas las personas o hay un No recomendado para…
AJ: Yo no lo recomiendo a menores de 18 años, mujeres embarazadas o lactando o personas que toman medicamentos como los anticoagulantes, antirítmicos o antiepilépticos, que necesitan un nivel en sangre constante.
LC: ¿Está contraindicada la actividad física durante el programa
AJ: Los primeros días es mejor no hacer ejercicio. Después de unos días se puede empezar de a poco, y luego aumentar de a poco día a día. Pero en general hay que tomarse los 21 días con calma.
LC: Si una persona quiere empezar tu programa detox, ¿qué es lo primero que le recomendás hacer? ¿Leer el libro Clean, investigar tu web, contactarse contigo o con tu grupo de colaboradores (coaches)?
AJ: Depende, no hay una sola manera de empezar. Creo que leer el libro es importante porque explica en detalle los conceptos y el programa en si. Pero mucha gente lo hace sin leer el libro también.
LC: Vivís en Estados Unidos. ¿Atendés personalmente a algunas personas que hacen el Clean?
AJ: Vivo en Los Angeles con mi mujer y mis tres hijos. Atiendo a mucha gente personalmente. El programa Clean es una de las herramientas que uso para ayudar a mis pacientes, pero también uso muchas otras, y tengo una red de doctores y sanadores con los que trabajo en equipo diseñando tratamientos multidisciplinarios dependiendo de cada persona y sus problemas de salud específicos.
LC: En tu web se menciona a un grupo de Wellness Coach Support que es gratis y que ayuda a los pacientes antes, durante y después del Clean. ¿Considerás que es importante estar apoyado durante estas 3 etapas?
AJ: Considero que es importante el apoyo en cualquier emprendimiento, especialmente en los que conciernen a la salud.
LC: ¿A qué te referís cuando hablás del Cleanse Support?
AJ: En USA vendemos un kit que contiene todos los productos necesarios para hacer el programa. Esto facilita mucho el hacerlo, porque mucha gente esta muy ocupada como para ir al supermercado y prepararse los licuados, jugos y comidas. Sólo lo vendemos en Estados Unidos, pero estamos en el proceso de exportarlo a otros países, incluido el Uruguay. Los productos que lo componen son shakes para el desayuno y la cena, un antibiótico herbal, enzimas digestivas y un probiótico.
LC: Alimentos que prohibirías para siempre…
AJ: El 60 % de los problemas de salud por los que me consultan mis pacientes se mejoran enormemente o del todo al eliminar los productos lácteos, las harinas (gluten), el azúcar, el alcohol, y el café. Esto no quiere decir que yo prohibiría nada, simplemente que antes de hacer diagnósticos y exámenes complicados, los pongo a mis pacientes en le dieta de eliminación por dos o tres semanas y después vemos que síntomas perduran.
LC: Alimentos que no pueden faltar en una rutina alimenticia…
AJ: Vegetales.
LC: Además del best seller Clean, ¿qué otro libro sacaste a la venta?
AJ: El Metodo CLEAN para el intestino es mi segundo libro, que también es un best seller. En enero sale un libro de recetas y más adelante otro libro que estoy escribiendo sobre embarazos, partos y crianza de niños de una manera más natural de la que estamos practicando hoy en día. Todo esto lo aprendimos mi mujer y yo al tener nuestros chicos, y estamos escribiendo el libro juntos.
LC: Tenés entre tus clientes a los llamados «celebrities». ¿Me podés nombrar alguno/a?
AJ: Te puedo nombrar solamente a los que por su cuenta hicieron público el hecho de que consultaron conmigo: Gwyneth Paltrow, Demi Moore, Robert Downey junior, Kate Hudson, Stacy Kiebler, Donna Karan, Mariska Hargitay, Josh Radnor, Jake Gyllenhal, Madonna, entre otros.
LC: ¿A cuántos países llegó el programa Clean?
AJ: Mi primer libro está traducido a 22 idiomas: inglés, español, francés, italiano, polaco, croata, danés, finlandés, coreano, mandarín, cantonés, ruso, indonés, romano, hebreo, entre otros; pero en nuestra comunidad online hay gente de muchos otros países.
Contacto:
Cleanprogram.com
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Acerca del autor
Me llamo Dolores de Arteaga y soy del 70. Amo la vida, con sus dulzuras y sus sinsabores, con mi pasado y mi presente. Tengo un largo camino recorrido como mujer y como ser humano, con todo lo que estas palabras implican. Fui niña y adolescente. Soy hija y madre, mujer de mi marido y amiga. ¿Mi marido? Mi pilar, el compañero que elegí desde que lo conocí, que nunca me cortó las alas para volar. ¿Mis hijos? Son lo más importante y fuerte que me pasó desde que nací. ¿Mis amigas? Son del alma, fueron mi propia elección, son mi otro yo, ven la vida con mis mismos lentes. sobremi Fui maestra, dueña de una tienda de segunda mano y ahora soy bloggera. Siempre digo que mis ciclos duran diez años; me gustan los cambios, reinventarme cada tanto. Me parece que las mutaciones forman parte del movimiento y de la riqueza de la vida. A partir de los 40 sentí que estaba empezando la otra mitad de mi existencia y se me despertaron gustos e intereses que quizás estaban dormidos. Me siento más entusiasta ahora que a los 20. Se preguntarán “¿qué se le dio por hacer un blog?”. Tengo intereses de todo tipo. Considero que leer es uno de los placeres de la vida, que el arte nos estimula los sentidos y que viajar nos enriquece el intelecto y el alma. Siempre me gustó descubrir la otra cara de las ciudades, hacer hallazgos donde no es fácil identificar a primera vista, descubrir y redescubrir lugares, conocer a la gente, estudiar la naturaleza humana en sus diferentes realidades, hurgar un libro hasta el cansancio, improvisar críticas de cine de lo más personales con amigas, salirme del clásico circuito pautado por unos pocos y estar pendiente de qué se puede hacer acá, allá o donde fuere. Pero sobre todo, me gusta reírme, y si es a carcajadas, mejor todavía. También soy una máquina de registrar datos. Siento un disfrute especial cuando lo hago. Mis amigas me llaman las “páginas amarillas”. Y hasta acá llegué para no aburrirlos hablándoles de mi. ¡Entren a descubrir el blog! ¡Para mí es un verdadero disfrute hacerlo!
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