“A los hombres les encanta leer mi blog, son mucho más chusmas de lo que normalmente se cree”
Cuerpo & Alma
Entrevista a Tessa García, que lleva adelante el blog La Oriental desde hace cinco años.
Esta vez es el turno de la bloggera Tessa García. Cada vez que esta mujer, ocupada en labores –como ella misma prefiere definir su ocupación-, postea, es inevitable: se me dibuja una sonrisa. Fresca, desfachatada, fiel a su esencia y con el sentido de la percepción muy desarrollado… Así es Tessa.
Dolores: ¿Cuándo y cómo empezaste con La Oriental?
Tessa García: Empecé el blog hace cinco años, tenía dos bebas chicas, salía poco y no trabajaba fuera de casa, entonces me pareció una buena forma de comunicarme.
D: ¿Por qué el nombre La Oriental, apuntes para el ama de casa?
TG: En un principio yo quería que fuera La Uruguaya pero no estaba disponible ese dominio y al final llegué a La Oriental, apuntes para el ama de casa porque pensaba de verdad escribir recetas y tips para cuidar niños y esas cosas.
D: ¿Fue una necesidad personal hacer un blog? ¿Un tema de catarsis?
TG: Siempre escribí diarios íntimos, es un poco la continuación, aunque ahora trato de ser más entretenida.
D: Da la impresión que las palabras te fluyen. ¿Es tan así?
TG: Fluyen demasiado, por eso trato de dejar pasar unas horas, idealmente una noche de sueño antes de publicar, para hacer una buena edición.
D: ¿Qué es lo que te impulsa a escribir sobre un determinado producto, persona o situación?
TG: Escribo cosas que me gustaría leer a mí, algo de lo que no se haya escrito antes, algo raro o por lo menos gracioso o conmovedor.
D: Algunos de tus posts son polémicos. Cuando los leo no puedo evitar reírme sola al mismo tiempo que pienso: «La van a linchar!». ¿Creés que generás “enemigos”?
TG: Capaz que con algunos me gano antipatías, pero son superficiales y pueden desaparecer con otro post en el que gane simpatías.
D: ¿Cada cuánto posteás?
TG: Cuando estoy entusiasmada tres veces por semana, pero a veces dejo pasar más.
D: Cuando hacés un trámite y tenés que llenar el espacio de profesión, ¿qué ponés?
TG: Pongo labores, le copio a mamá que escribe lo mismo.
D: ¿Cómo sos en reuniones familiares o de amigos? ¿Sos personaje o perfil bajo?
TG: Creo que en una familia sos todo dependiendo de la pierna con la que te levantes. A veces grito, a veces estoy muda, a veces me hago la nunca vista, a veces escucho los problemas de todos con cara de buena… Qué se yo…De todo.
D: ¿De quién creés que heredaste el humor ácido, polémico o como quieras llamarle?
TG: De nadie, soy absolutamente única.
D: ¿Sos así en la vida real?
TG: No. En la vida real trato de ser agradable siempre.
D: ¿Cuántos seguidores tenés?
TG: Miles.
D: Tus seguidores, ¿de qué género son?
TG: A los hombres les encanta leer mi blog, son mucho más chusmas de lo que normalmente se cree, mucho más jodones que las mujeres. Pero a las mujeres también les gusta, me escriben mucho alentándome y proponiéndome temas.
D: Algo inolvidable que te haya escrito un seguidor…
TG: Me encanta cuando me cargan, es esa eterna coquetería de querer sentirte atractiva aunque tengas seiscientos hijos.
D: Alguna anécdota que haya surgido posteriormente a una nota o post…
TG: No es una anécdota pero pasó hace poco. Un tipo dejó un comentario agresivo y lo firmó anónimamente, a pesar de que nos conocíamos. Un programita muy básico que tengo lo descubrió y me tuvo que llamar por teléfono para disculparse. El anonimato en internet es muy relativo, si sos un navegante amateur más te conviene ser recto y actuar como si todo el mundo te estuviera mirando.
D: ¿Sentís que ser bloggera es lo tuyo?
TG: Sí.
D: Una vez escrito y publicado el post, ¿qué sentís?
TG: Me siento copada.
D: ¿Qué opina tu familia del blog?
TG: A mi padre le encantaba, no se perdía ni uno (murió hace poco). Mi madre es muy crítica. Mi marido piensa que soy un genio, mi hermana también y mis tres hermanos varones lo leen salteado.
D: ¿A tus hijas alguna vez le leíste algo de lo que escribiste en el blog?
TG: Si lo hiciera se pasarían interrumpiéndome todo el tiempo: “Mamá quiero hacer pis”; “Mamá quiero agua”; “Mamá una banana”, son muy chicas, tienen 1 año y medio, 4 y 5 años, no les interesa en lo más mínimo. Cuando sean adolescentes tampoco les va a interesar lo que yo escriba, así que no me hago problema.
D: ¿Alguna vez hiciste terapia?
TG: Una vez cuando tenía 27 años me enamoré de un tipo pero él no y casi me muero. Empecé a ir al Dr. Alejandro Scherzer, quien me bancó la cabeza y no me indicó ninguna pastilla. Ahí nació mi primer blog, que se llamaba “Mal de amores” (http://tengomaldeamores.com).
D: Tenés dos libros en tu haber. Contá cómo se llaman y de qué se tratan…
TG: El primero fue Manual ilustrado de la gente bien, con PalabraSanta, un libro con una edición lindísima sobre algo parecido al patriciado uruguayo actual, cómo habla, cómo se viste, sus códigos.
Y el otro libro fue Cómo conseguir un novio en el súper, paso por paso, de Fin de Siglo. Es sobre la maternidad, la familia, la sociedad uruguaya, es bastante divertido y una mezcla de frívolo e intenso… Es difícil de definir.
Si volviera a nacer quisiera ser…Charlotte Rampling y, si no se puede, Meryl Streep.
Mi miedo más irracional es…Quedarme pelada.
Lo más loco que hice en mi vida fue… Tener dos hijos muy seguidos, tanto que parecen mellizos.
Lo que más me gusta de mi son… Mis piernas.
Mi peor defecto es que soy… Muy holgazana.
Lo más lindo de mi infancia, fue… Toda linda, en la calle Potosí.
Un flash de un recreo… Lo que me copaba jugar al elástico.
Soy una mamá…Gallina gorda que hace dieta.
Tessa García
Laoriental.com.uy
Apuntes para el ama de casa
laoriental.com.uy
Montevideo
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Acerca del autor
Me llamo Dolores de Arteaga y soy del 70. Amo la vida, con sus dulzuras y sus sinsabores, con mi pasado y mi presente. Tengo un largo camino recorrido como mujer y como ser humano, con todo lo que estas palabras implican. Fui niña y adolescente. Soy hija y madre, mujer de mi marido y amiga. ¿Mi marido? Mi pilar, el compañero que elegí desde que lo conocí, que nunca me cortó las alas para volar. ¿Mis hijos? Son lo más importante y fuerte que me pasó desde que nací. ¿Mis amigas? Son del alma, fueron mi propia elección, son mi otro yo, ven la vida con mis mismos lentes. sobremi Fui maestra, dueña de una tienda de segunda mano y ahora soy bloggera. Siempre digo que mis ciclos duran diez años; me gustan los cambios, reinventarme cada tanto. Me parece que las mutaciones forman parte del movimiento y de la riqueza de la vida. A partir de los 40 sentí que estaba empezando la otra mitad de mi existencia y se me despertaron gustos e intereses que quizás estaban dormidos. Me siento más entusiasta ahora que a los 20. Se preguntarán “¿qué se le dio por hacer un blog?”. Tengo intereses de todo tipo. Considero que leer es uno de los placeres de la vida, que el arte nos estimula los sentidos y que viajar nos enriquece el intelecto y el alma. Siempre me gustó descubrir la otra cara de las ciudades, hacer hallazgos donde no es fácil identificar a primera vista, descubrir y redescubrir lugares, conocer a la gente, estudiar la naturaleza humana en sus diferentes realidades, hurgar un libro hasta el cansancio, improvisar críticas de cine de lo más personales con amigas, salirme del clásico circuito pautado por unos pocos y estar pendiente de qué se puede hacer acá, allá o donde fuere. Pero sobre todo, me gusta reírme, y si es a carcajadas, mejor todavía. También soy una máquina de registrar datos. Siento un disfrute especial cuando lo hago. Mis amigas me llaman las “páginas amarillas”. Y hasta acá llegué para no aburrirlos hablándoles de mi. ¡Entren a descubrir el blog! ¡Para mí es un verdadero disfrute hacerlo!
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