Si de cactus se tratara
Deco & Diseño
Tuni & Tana, un emprendimiento bajo la consigna de “desarrollar productos divertidos con un perfil latinoamericano y artesanal, hecho con mucho amor”
Muchas personas tienen pasión por alguna cosa u objeto y no entienden bien por qué. Como en todo verdadero amor, resulta una pérdida de tiempo buscarle, como bien dicen, razones al corazón. Conozco una persona que puede pasarse horas mirando un reloj, otra que se detiene embelesada cada vez que ve un faro, o quien por alguna razón desconocida tiene debilidad por las puertas. A mí me pasa algo similar con los cactus. Por alguna extraña razón que no puedo poner en palabras los cactus me provocan algo… Era esperable entonces al ver unos cactus con sus macetas revestidas de tela en Facebook estos captaran inmediatamente mi atención. Me contacté con sus creadoras y resultaron ser encantadoras, dos emprendedoras que hacen las cosas con tantas ganas que da placer.
Tuni & Tana nació en abril del 2012, tuvo un breve impasse a finales de ese mismo año y volvió nuevamente a las canchas en mayo del 2013, con todas las energías recargadas y muchas novedades, varias de las cuales aún están desarrollándose.
Las que llevan adelante este emprendimiento son Leticia y Jandira, ambas diseñadoras: la primera licenciada en Diseño Textil y la segunda casi casi diseñadora industrial.
Antes de empezar con Tuni & Tana ambas socias habían trabajado en empresas en el rubro diseño. Pero siempre estaba latente la inquietud de poder crear productos que no generaran emociones fugaces y fueran a terminar en el fondo de un cajón, sino que las personas pudieran vincularse emocionalmente con ellos.
La idea surgió una tarde de té y cosas ricas, conversando sobre estas ganas latentes, poniendo el acento en desarrollar productos divertidos con un perfil latinoamericano y artesanal, hechos con mucho amor. Eran conscientes, ya que ambas son apasionadas por la investigación en Internet, de la tendencia, sobre todo en otros países, de crear una conjunción entre elementos naturales y de diseño. Así se dieron cuenta de que una planta no es un regalo muy común ya que, por lo general, no se presenta como tal. Y les sedujo la idea de imaginarse a las personas regalándose plantas, y de esta forma dándole vida y color a los hogares.
La elección de los cactus y las suculentas dentro de la amplia gama de plantas que existen, fue por una inclinación personal, un gusto particular que tenían por ellas.
En ese entonces les surgió la oportunidad de participar en una feria de diseño, con otros productos que ya hacía cada una, y con la idea de introducir las tunas como producto en conjunto. Las primeras tunas estaban “vestidas” con un textil muy colorido típico de Latinoamérica, que decidieron dotar de personalidad a través de un cartelito, inspirándose en la morfología de cada una pero que perfectamente podía describir, en clave positiva, a una persona.
Nacieron entonces “Lady Pomposa: exuberante, cautivadora y de baja estatura”, “Lady Dolce: dulce y sincera, la amiga del pueblo”, “Lady Rosita: chismosa pero tierna, pequeña parlante”, “Lady Pinchita: personalidad difícil con vestigios de femme fatale”, “Lady Frizz: nunca la cites un día de humedad” y muchas más.
Durante los días que duró la feria, las tunas y sus personalidades llegaron mucho a la gente, que pasaba y se detenía a leer los cartelitos, robando sonrisas y más que una carcajada, generando eso que tanto querían ambas dueñas, un cariño por estas criaturas.
Ahí fue que se preguntaron, ¿por qué no crear una marca de tunas con diseño como valor agregado, que robe sonrisas y produzca alegría a quién la reciba? En realidad, Tuni & Tana ya había nacido, solo faltaba ponerle el nombre.
En este año han seguido desarrollando el concepto, han incorporado cartelitos felices con mensajes súper positivos como “Hoy todo el viento es a favor” o “Si puedes soñarlo, puedes hacerlo” y otros productos que siguen esta línea positiva y alegre.
Las vedette de la marca siguen siendo las tunas, pero también han incorporado posavasos con mensajes cancheros; porta-macetas o porta-elementos más grandes; llaveros y otras que todavía se están cocinando pero ya están por salir.
Cada vez diseñan cartelitos para más ocasiones a pedido de sus clientes: para cumpleaños, para embarazadas o para parejas que se están mudando juntas y armando su casa.
Sus dos Talleres – Atelier: uno en el barrio Palermo y otro en Ciudad Vieja, se pueden visitar durante la semana con cita previa a través de Facebook (Tuni Tana) o vía e-mail (tuniytana@gmail.com).
Los sábados que no llueve las encuentran en la Feria Villa Biarritz, y también están en varias tiendas de diseño:
– «Con una condición» / Gabriel Pereira 3031
– » Las Hilarias» /Scoseria 2528
– » Quien te viera» / Peatonal Bacacay
– “ Diseño sur artesano” en el “Mercado Agrícola”
– “ Fulana de tal” / Dr. Tristán Narvaja 1625, esq. Uruguay
– “ Opa! 7mm” en Galería Sanfys / 18 de julio 1296 local 11
– “ Froucina Tienda” / Almería 4729
– «La Vitrina» / Wilson Ferreira Aldunate 1320
Y próximamente en:
* Maldonado: “Makko” / 18 de julio 663
Sus redes sociales son:
Facebook : Tuni Tana
Fanpage: Tuni& Tana
Twiter: @Tuni Tana
Pinterest: Tuni Tana
mail: tuniytana@gmail.com
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Acerca del autor
Me llamo Dolores de Arteaga y soy del 70. Amo la vida, con sus dulzuras y sus sinsabores, con mi pasado y mi presente. Tengo un largo camino recorrido como mujer y como ser humano, con todo lo que estas palabras implican. Fui niña y adolescente. Soy hija y madre, mujer de mi marido y amiga. ¿Mi marido? Mi pilar, el compañero que elegí desde que lo conocí, que nunca me cortó las alas para volar. ¿Mis hijos? Son lo más importante y fuerte que me pasó desde que nací. ¿Mis amigas? Son del alma, fueron mi propia elección, son mi otro yo, ven la vida con mis mismos lentes. sobremi Fui maestra, dueña de una tienda de segunda mano y ahora soy bloggera. Siempre digo que mis ciclos duran diez años; me gustan los cambios, reinventarme cada tanto. Me parece que las mutaciones forman parte del movimiento y de la riqueza de la vida. A partir de los 40 sentí que estaba empezando la otra mitad de mi existencia y se me despertaron gustos e intereses que quizás estaban dormidos. Me siento más entusiasta ahora que a los 20. Se preguntarán “¿qué se le dio por hacer un blog?”. Tengo intereses de todo tipo. Considero que leer es uno de los placeres de la vida, que el arte nos estimula los sentidos y que viajar nos enriquece el intelecto y el alma. Siempre me gustó descubrir la otra cara de las ciudades, hacer hallazgos donde no es fácil identificar a primera vista, descubrir y redescubrir lugares, conocer a la gente, estudiar la naturaleza humana en sus diferentes realidades, hurgar un libro hasta el cansancio, improvisar críticas de cine de lo más personales con amigas, salirme del clásico circuito pautado por unos pocos y estar pendiente de qué se puede hacer acá, allá o donde fuere. Pero sobre todo, me gusta reírme, y si es a carcajadas, mejor todavía. También soy una máquina de registrar datos. Siento un disfrute especial cuando lo hago. Mis amigas me llaman las “páginas amarillas”. Y hasta acá llegué para no aburrirlos hablándoles de mi. ¡Entren a descubrir el blog! ¡Para mí es un verdadero disfrute hacerlo!
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