Una idea que parte de la vieja y querida frase: «la comida no se tira»
Cuerpo & Alma
Proyecto Plato Lleno es una iniciativa de los argentinos Alexis Vidal y Paula Martino, quienes ponen sus manos a la obra para que el sobrante de los eventos no termine en la basura
Por Dolores de Arteaga
Todo surgió en una charla de café, en enero de 2013. Tanto Alexis Vidal como Paula Martino, ambos argentinos, trabajan en una empresa de catering. Su permanente preocupación siempre fue ver cómo, evento tras evento, el sobrante de la comida se iba al tacho, literalmente. Comenta Paula: “Alexis, al tener su propia empresa de catering, fue un tema que lo movilizó a hacer algo para evitar que siga sucediendo.” Conversando sobre esa inquietud compartida, Alexis propuso ponerse manos a la obra. Así comenzó a gestarse el Proyecto Plato Lleno, que se materializó en junio de 2013, y que por ahora funciona solo a nivel Buenos Aires y se lanzó también en Perú.
En todo momento dejan claro que el foco debe estar en el proyecto, y no en ellos dos. Proyecto Plato Lleno (PPLL) es una iniciativa cien por ciento solidaria y voluntaria, que busca recuperar la comida que no llega a ser consumida en eventos sociales y que usualmente termina en la basura.
Retiran los alimentos elaborados que finalmente no fueron consumidos en los eventos, procurando que lleguen directo a Hogares, Comedores, Instituciones, y demás lugares que quieran y puedan recibirlos.
Un proyecto que deja pensando. Quién no sintió alguna vez dolor por toda esa comida sobrante, que se sabía de antemano que iba a morir en un contenedor. “El que luego llevemos esos alimentos a Hogares y Comederos es ‘secundario’, no es nuestra misión principal”, comenta Paula. Un proyecto que cierra por todos lados, donde la ecuación es perfecta. Comida a tirar, comida donada. Benefactores y beneficiados. Un proyecto posible de replicar en Uruguay.
Dolores: ¿Qué repercusión social tuvo Proyecto Plato Lleno?
Paula Martino: La repercusión social fue muy buena y muy grande. El tema del desperdicio de alimentos es un tema sensible que nos toca a todos, y esta idea viene a ser una especie de “solución” o de “puente” entre quienes tienen los alimentos y quienes pueden recibirlos. No sabemos ni tampoco somos quién para decir si es “la mejor” solución, quizás haya mejores, ésta es sólo una idea que al menos hasta ahora viene funcionando, está comprobado que es realizable, está siendo aceptada y aplicada por varias personas.
D: ¿Cuánta gente hay trabajando en el proyecto? ¿Todos voluntarios?
PM: Plato Lleno es llevado adelante por Alexis y por mi, que somos quienes coordinamos todas las donaciones. Hay varios voluntarios que nos ayudan en distintas tareas y, además, en muchas ocasiones participan de las entregas. Y sí, somos todos voluntarios por ahora.
D: Tienen apoyo del gobierno?
PM: No, no tenemos apoyo de nadie y no dependemos de nadie tampoco.
D: ¿Qué tipo de comida puede donarse?
PM: Cualquier tipo de comida elaborada, ya sea salada o dulce, exceptuando helados o productos con alta exigencia en la cadena de frío. En caso de que sólo sea comida a refrigerar, la donación quedará sujeta a la obtención de un camión refrigerado para efectuar su traslado.
D: ¿Cómo determinan los lugares beneficiarios de la comida?
PM: Proyecto Plato Lleno está en contacto con varias Instituciones situadas en el ámbito de la C.A.B.A. (Ciudad Autónoma de Buenos Aires). Algunas ya han recibido comida dentro del marco que PPLL ofrece. Las instituciones son elegidas de acuerdo a los niveles de vulnerabilidad, necesidades, tipos de alimentos a entregar, y cercanía al lugar del evento.
D: ¿Quiénes pueden participar como benefactores del proyecto?
PM: Empresas de catering; centros de exposiciones; salones de fiestas; cruceros; hoteles particulares; organizadores de eventos; productores de eventos, así como también todas aquellas personas físicas y jurídicas que puedan y quieran colaborar. Nos apoyan y acompañan distintas empresas de catering que nos van avisando cuándo tienen eventos con posibles excedentes de alimentos para donar. Al día de hoy, ya hemos realizado donaciones con al menos diez empresas de catering.
D: ¿Cuántas veces a la semana salen a hacer el recorrido para recolectar la comida? ¿Tienen un recorrido fijo, o lo van variando?
PM: Básicamente salimos “cuando hay un evento”, así funciona Plato Lleno, no hay un recorrido ni fijo ni estipulado. Nos van llegando informaciones de distintos eventos, los analizamos, y si cumplen con lo que requerimos coordinamos para ir y retirar los alimentos. Se evaluará cada caso en particular.
Vamos variando los lugares de donación para no repetirlos. Siempre entregamos en lugares que sean cercanos al evento, y también depende del tipo y cantidad de comida que estemos llevando.
D: ¿Cómo saber si un evento cumple con los requerimientos pedidos?
Si tu evento tiene más de 200 invitados con menú tradicional, recepción a fin de fiesta, es un potencial donante. Si tiene menos invitados, hasta 130, pero el menú es asado, también es un potencial donante y habría un excedente para retirar. De lo contrario, te recomendamos que puedas llevarte lo que haya sobrado a tu hogar, o distribuirlo entre la familia. Recordá que lo importante es que la comida ¡no se tire!
D: ¿Cómo se calcula la comida que no se va a llegar a consumir en un evento y que se quisiera donar?
PM: Por lo general, para un evento de seis a ocho horas se elabora un kilo por persona, y en uno de tres a cinco horas quinientos gramos por persona aproximadamente, en ambos casos lo que no llega a consumirse es el cinco por ciento de comida elaborada, ese porcentaje sería la donación. También podemos considerar que por invitado de una fiesta, con un menú integrado por recepción a fin de fiesta, se elaborarían aproximadamente un quilo por persona. Entonces, en un evento de quinientas personas se producen quinientos kilogramos de comida, donde se podría estimar una donación de veinticinco kilogramos aproximados.
D: ¿Cómo es el procedimiento una vez recogidos los alimentos ?
PM: Retiramos y entregamos en el mismo momento, sea la hora que sea, máximo tardamos media hora desde que salimos con los alimentos del evento, hasta que son entregados en alguna institución. Utilizamos envases descartables.
D: Cuando lo implementaron, ¿ya existía la idea a nivel mundial?
PM: No lo sabemos, al menos en Argentina no. Está el Banco de Alimentos, pero es distinto, distribuye alimentos no perecederos. Plato Lleno distribuye alimentos elaborados.
D: Por el momento solo funciona a nivel Buenos Aires. ¿Tienen pensado extender sus servicios?
PM: Por ahora sólo estamos en Buenos Aires, pero ya hay varias ciudades interesadas en replicarlo, incluso también otros países como Chile y España.
D: Desde que empezaron hasta hoy día el proyecto creció mucho…
PM: El proyecto creció un montón, pero lo vamos manejando con la misma responsabilidad y compromiso que al principio. Respondemos todos los mensajes, mails, y estamos bien organizados con distintos documentos que fuimos realizando para enviar a quienes nos consultan por información.
D: ¿Cómo se proyectan a futuro?
PM: Esperamos que Plato Lleno siga creciendo, veremos si podemos obtener algún tipo de Personería Jurídica, para así comenzar a solicitar donaciones en dinero que hagan que el proyecto sea autosustentable. Hasta ahora venimos solventando nosotros todos los costos.
D: Un mensaje a la población uruguaya…
PM: Que se animen a replicar la idea, es más simple de lo que parece y tienen todo nuestro apoyo e información disponible para llevarla adelante.
Contacto:
Proyecto Plato Lleno
Mail proyectoplatolleno@gmail.com
Facebook https://www.facebook.com/ProyectoPlatoLleno
Twitter@PlatoLleno
Varios famosos se van sumando a la propuesta…
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Acerca del autor
Me llamo Dolores de Arteaga y soy del 70. Amo la vida, con sus dulzuras y sus sinsabores, con mi pasado y mi presente. Tengo un largo camino recorrido como mujer y como ser humano, con todo lo que estas palabras implican. Fui niña y adolescente. Soy hija y madre, mujer de mi marido y amiga. ¿Mi marido? Mi pilar, el compañero que elegí desde que lo conocí, que nunca me cortó las alas para volar. ¿Mis hijos? Son lo más importante y fuerte que me pasó desde que nací. ¿Mis amigas? Son del alma, fueron mi propia elección, son mi otro yo, ven la vida con mis mismos lentes. sobremi Fui maestra, dueña de una tienda de segunda mano y ahora soy bloggera. Siempre digo que mis ciclos duran diez años; me gustan los cambios, reinventarme cada tanto. Me parece que las mutaciones forman parte del movimiento y de la riqueza de la vida. A partir de los 40 sentí que estaba empezando la otra mitad de mi existencia y se me despertaron gustos e intereses que quizás estaban dormidos. Me siento más entusiasta ahora que a los 20. Se preguntarán “¿qué se le dio por hacer un blog?”. Tengo intereses de todo tipo. Considero que leer es uno de los placeres de la vida, que el arte nos estimula los sentidos y que viajar nos enriquece el intelecto y el alma. Siempre me gustó descubrir la otra cara de las ciudades, hacer hallazgos donde no es fácil identificar a primera vista, descubrir y redescubrir lugares, conocer a la gente, estudiar la naturaleza humana en sus diferentes realidades, hurgar un libro hasta el cansancio, improvisar críticas de cine de lo más personales con amigas, salirme del clásico circuito pautado por unos pocos y estar pendiente de qué se puede hacer acá, allá o donde fuere. Pero sobre todo, me gusta reírme, y si es a carcajadas, mejor todavía. También soy una máquina de registrar datos. Siento un disfrute especial cuando lo hago. Mis amigas me llaman las “páginas amarillas”. Y hasta acá llegué para no aburrirlos hablándoles de mi. ¡Entren a descubrir el blog! ¡Para mí es un verdadero disfrute hacerlo!
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