Plato caliente
Cuerpo & Alma
El objetivo principal, como lo dice su nombre, es brindar comida; pero también hay otro sumamente importante: salir lentamente de la marginalidad en la que viven.
Sabemos que no vamos a cambiar al mundo con nuestra tarea. Muchas veces sentimos que nuestra tarea es en vano y es entonces cuando recurrimos a nuestro lema: “A veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le faltara esa gota”. Madre Teresa de Calcuta
Plato Caliente funciona desde el año 2006 y de marzo a diciembre, todos los martes, entregan viandas a familias carenciadas; hoy día están en 540 platos calientes por martes, que se cocinan en casas de voluntarios.
A cada persona se le entrega: una vianda con tapa que contiene un guiso calentito; un pan; una naranja (donada por Caputto) y un litro de leche (donado por Conaprole).
Todo comenzó cuando Luciana Belderrain, sensibilizada por una situación familiar, motivó a un grupo de amigas a crear un proyecto propio para ayudar a los más necesitados. A grandes rasgos, así se formó PLATO CALIENTE, un grupo sin fines de lucro.
El objetivo principal, como lo dice su nombre, es brindar comida; pero también hay otro sumamente importante: salir lentamente de la marginalidad en la que viven.
También hacen varias campañas al año. Marzo: campaña de útiles escolares; mayo: campaña del abrigo, se juntan frazadas y mantas; agosto: campaña del juguete para el Día del Niño; octubre: campaña ropa de verano; diciembre: campaña de Navidad: juguetes.
Como novedad, este año implementaron una biblioteca móvil, en la cual retiran libros que luego tendrán que ser devueltos, desarrollando así el sentido de la responsabilidad y el compromiso. Por este motivo, noviembre será un nuevo mes de recolección, pero esta vez será el turno de los libros.
Por más info, colaboraciones o voluntarios, contactarse con:
obraplatocaliente@gmail.com / 095 417 006
Banco Itaú, caja de ahorro en pesos n. 9534967 y caja de ahorro en dólares n. 8554735
¿Qué opinás?
Acerca del autor
Me llamo Dolores de Arteaga y soy del 70. Amo la vida, con sus dulzuras y sus sinsabores, con mi pasado y mi presente. Tengo un largo camino recorrido como mujer y como ser humano, con todo lo que estas palabras implican. Fui niña y adolescente. Soy hija y madre, mujer de mi marido y amiga. ¿Mi marido? Mi pilar, el compañero que elegí desde que lo conocí, que nunca me cortó las alas para volar. ¿Mis hijos? Son lo más importante y fuerte que me pasó desde que nací. ¿Mis amigas? Son del alma, fueron mi propia elección, son mi otro yo, ven la vida con mis mismos lentes. sobremi Fui maestra, dueña de una tienda de segunda mano y ahora soy bloggera. Siempre digo que mis ciclos duran diez años; me gustan los cambios, reinventarme cada tanto. Me parece que las mutaciones forman parte del movimiento y de la riqueza de la vida. A partir de los 40 sentí que estaba empezando la otra mitad de mi existencia y se me despertaron gustos e intereses que quizás estaban dormidos. Me siento más entusiasta ahora que a los 20. Se preguntarán “¿qué se le dio por hacer un blog?”. Tengo intereses de todo tipo. Considero que leer es uno de los placeres de la vida, que el arte nos estimula los sentidos y que viajar nos enriquece el intelecto y el alma. Siempre me gustó descubrir la otra cara de las ciudades, hacer hallazgos donde no es fácil identificar a primera vista, descubrir y redescubrir lugares, conocer a la gente, estudiar la naturaleza humana en sus diferentes realidades, hurgar un libro hasta el cansancio, improvisar críticas de cine de lo más personales con amigas, salirme del clásico circuito pautado por unos pocos y estar pendiente de qué se puede hacer acá, allá o donde fuere. Pero sobre todo, me gusta reírme, y si es a carcajadas, mejor todavía. También soy una máquina de registrar datos. Siento un disfrute especial cuando lo hago. Mis amigas me llaman las “páginas amarillas”. Y hasta acá llegué para no aburrirlos hablándoles de mi. ¡Entren a descubrir el blog! ¡Para mí es un verdadero disfrute hacerlo!
Ver todas las entradas de lacitadina.